La Piedra que era yo

                             O Cuentos Verdaderos pero Inverosímiles

Llanero soy, y por ello, Sobre la sabana la palma, sobre mi caballo yo sobre yo mi sombrero y sobre mi sombrero la azul celeste cúpula del inmenso cielo llanero.

Sabana palmaritales y morichales, y allí en medio de la nada por los polvorientos e

 incontables caminos de Florentino,  una piedra, pero no una piedra cualquiera, no esta piedra tenia características disimiles de otras tantas piedras, era una  grande formación granítica y cuyas dimensiones tenían forma de asiento, si de un cómodo y gran asiento donde los pasantes podían muy bien detenerse y sentados allí disfrutar del solaz de la inmensidad de la sabana, abstraerse en la observación de la singular diversidad de formas de los chaparros, de las aves, extasiarse contemplando la variada biodiversidad de los morichales verdaderos dadores de vida de sus fuentes manantiales cuyas aguas tienen el don de dar energía y vigor a quienes de ella gusten, allí en los morichales cohabitan infinidad de especies animales en libre albedrio y en perfecta armonía y comunión con la surtida y variada vegetación.

En fin, estando esta piedra en tan singular posición estratégica allí en mitad de la inmensidad de las sabanas del inconmensurable llano, era fiel testigo de cuantas cosas pudiesen pasar por esos lares, y es que también esta, tenia la inverosímil propiedad de oír y hablar con quienes se dignaran sentarse en ella, pero tenia sus preferencias, tampoco compartía  charlas ni coloquios con cualesquier ser pensante que por allí pasara, no, como formación genésica e interpretita de los siglos contenía en si mucha sapiencia y conocimiento de las verdaderas historias, no de la historia como la pintan o escriben a conveniencia de sociedades que tergiversan las más de las veces los hechos y la secuencia real de estos para sacar provecho propio y hacer de los Pueblos que se creen sus patrañas vil escarnio.

Un buen día de su pretérito haber de la memoria, sintió acercarse a un par de personas, un hombre y una mujer,  que parecían no entenderse muy bien, pues venían discutiendo algo así como que: bueno decía el hombre, pero si alguien nos echo aquí ha de ser con algún fin, no creo que sea únicamente para andar errantes y consumiéndonos en el tiempo sin ningún oficio ni beneficio, a lo cual venia contestando la mujer, bueno si pero eso que tu me pides no se si será bueno el hacerlo por que en verdad quien nos hizo no delego en nosotros ninguna función de índole especial, sino que pareciera más bien que estamos condicionados a vivir en libre albedrio.

Bien así hablando fueron y llegaron a donde estaba la piedra y en ella se sentaron, esta siguió oyendo el coloquio que parecía incomprensible, no pero la piedra que era yo como piedra sapiente ya tenia idea de que se trataba,

Y entonces la piedra salió de su aparente inconmovilidad y así les hablo.

 Os pido me perdonen pero me voy a inmiscuir en su conversación, que al parecer trata de algo muy intimo y que tal ves solo a ustedes dos y a nadie más  atañe, pero es el caso que yo estoy para ayudar a quienes por aquí pasen y me confíen sus penas o aflicciones.

Aquellos seres quedaron boquiabiertos de oír hablar a la piedra, y no con poco susto trataron de allí alejarse, pero esta presintiendo su estupefacción, les calmo diciéndoles, no os preocupéis, yo también he sido obra de quienes ustedes también lo son, y desde el génesis del inmemorial tiempo también me preguntaba a mi misma que seria mi destino o cual mi propósito en la vida, si no se extrañen si digo vida es por que yo también llevo esta aunque la apariencia diga lo contrario, en mi palpitan todos los devenires y acontecimientos del mundo desde su misma fundación. He visto como El Gran Hacedor  solo con echar su estentórea Voz hizo todo lo hecho y lo por hacerse, es así que habiendo hecho el mundo, al principio de agua, luego tierra y después la pobló de infinidad de flora y fauna, y puso en el firmamento un sol y una luna para complemento de su obra. El uno que da luz Calor y vida a todo ser viviente, y la otra que en las noches da luz y sosiego. Y que entre ambos marcan la pauta del tiempo uno es el día la otra es la noche.

Ah bien, pero donde quedamos nosotros, es la gran incógnita que tenemos, pues no sabemos de bien ni de mal, y ni por que ni para que estamos aquí, y no queriendo cometer desatinos es por eso que necesitamos de que se nos de luz en el entendimiento.

Pues bien les dice la piedra, les hablo con mi boca de siglos, que he visto como en el andar del tiempo ha habido especies, seres que con el mismo pasar de este han ido evolucionando hasta formas de vida superiores, y por ello les digo, ustedes son venidos de la misma partícula y átomo de la tierra, del aire y del agua.

Y como así? Entonces quiere decir que no somos obra  del Gran Hacedor, y por consiguiente no tenemos a que rendirle pleitesía.

No, no, vamos a ver si nos entendemos, me voy explicar más someramente para que entendáis, si sois obra, hechura de Dios, puesto que como les he dicho en este mundo todo va evolucionando hasta alcanzar estados de vida superiores, es decir de adelanto progresivo, ustedes vienen de células que primero Vivian en el agua, y que como el agua contiene en si todos los componentes minerales de allí se nutrieron y fueron dando hasta llegar a lo que ahora son, y que ustedes son la simiente misma de lo que será la especie humana .

Ah pero entonces si es así que somos entonces si no somos ni animales ni vegetales, y cual es en verdad nuestro fin principal en este nuestro efímero paso por el orbe?...

Bien ustedes mismos lo han dicho su paso será efímero, pues solo sobreviran a unas tantas generaciones, y su fin o propósito en verdad es creced y multiplicaos pues ustedes son hombre y mujer, padre y madre de la especie humana, y aunque son animales, difieren del animal por tener  inteligencia, conciencia, entendimiento, conocimiento. Lo cual será lo que os lleve progresivamente a formas superiores sobre todo lo demás.

Ah bueno, y entonces como haremos para engendrar y proliferar y poblar la tierra por que somos inocentes criaturas y no tenemos aun el conocimiento de que hacer.

Pues bien todo eso vendrá con el amor, y a medida que vaya llegando este ustedes serán ahítos de unirse en cuerpo y alma y de esa unión es que darán a luz nuevas generaciones.

Ah pero y que es el amor, como sabremos cuando llegue, y si es así quiere decir que Dios también tiene mujer para poder haber engendrado todo lo que existe.

Oh no, no si bien Dios tiene la facultad y potestad de hacer y deshacer, se entiende que es uno solo e indivisible en un todo y no esta formado de acuerdo a genero, pero tiene como Dios la propiedad de contener en si caracteres del hombre y la mujer, o sea tiene una conformación parte masculina y otra femenina, y por su inmenso poder puede hacer a la hembra y hacer al varón. Y en cuanto al amor os les diré, ah el amor es como les diría, no tiene una definición especifica, es algo intangible, pudiéramos decir, es un sentimiento que nace desde las fibras más intimas del ser, es como una atracción física y sentimental a la vez, y es algo que ocurre por natura, es decir que siendo hechos de genero opuestos, hembra y macho se atraen pues es una ley física de que los polos opuestos se atraen.

Ah pero entonces quiere decir que si nos apareamos no incurriremos en desafueros para con Dios y que podremos procrear fundacionalmente la raza humana.

Como ya os dije, no puede ser pecado algo que sea natural y conveniente al cuerpo y a los sentidos, de hecho de verdad verdad Dios os ha dado la libertad para que ejerzan la facultad del libre albedrio, o sea como a ustedes mejor les parezca hacer la vida.

Y por el que dirán, por ahora no os preocupéis, que ya con el devenir del tiempo y de los siglos no faltara quienes digan que si  ustedes se llamaron Adán y Eva, y que les tentó una víbora malvada, y que si cayeron en tentación y que si comieron la manzana del árbol del mal, y que por ello murieron y heredaron  a su raza por ende la muerte, y que también por cometer pecado el hombre tendría que vivir afanado trabajando para lograr el pan de cada día, y que la mujer sufriría harto sumo con dolores de parto, etc,etc.

Pero si bien he de decirles que ciertamente si existe el tan consonado árbol del bien y del mal, pero no es este a merced de la tal malvada víbora, si no genéricamente hablando del hombre mismo, por que es este quien en su discernimiento ha de tener conciencia de tener comedimiento en todo cuanto hace, es decir hacerlas con medida, ni más ni menos.

Ah pero aun no terminamos de entender eso de que si existe el bendito árbol del bien y del mal, creemos que o se es o no se es.

Ah carrizo, con menos parafernalia me entendería cualquiera, pero cierto que ustedes tienen muy poco tiempo por aquí y mucho bastante por aprender,  les voy a detallar, todo en exceso hace daño, y carecer de lo esencial en exceso también hace daño. O sea Lo esencial para que sobrevivan es comer y beber, pero si en ello abusan de hecho padecerán, y si tenéis hambre y sed y no hayáis como saciarlas, también padeceréis.

Ah pero eso será solo con el comer y beber, por que si es así si podemos saciar todas las demás apetencias  y saturarlas con sordidez.

Uff, parece que o se hacen o son, vuelvo y les repito, es el árbol de la vida una forma simbólica, intangible de hacer entender al hombre las virtudes o desgracias que del  uso o abuso de la vida puedan hacer, y eso va para todos los aspectos de la vida, en el amor, en el trabajo, en el ocio.

Y en cuanto a que ustedes han dicho de que se es o no se es, es algo equiparable a la existencia que llevéis, o sea de cierto será, ser o no ser.

Por ello os aliento ea ea arrea vamos que para luego es tarde haced y multiplicaos y dejad de estar creyendo en cuentos de caminos ni en pajaritos preñaos, que quien les hizo estará de parabienes al ver como asumen su primordial tarea de procrear.

Ah pero y usted donde quedara, que será de su vida que más nos pudiera contar.

Ah caray, no quieran saber más de la cuenta, todo a su tiempo y momento, que hasta el conocimiento ha de tener comedida, y hay que dejar algo para contar a futuras generaciones allende el tiempo y el espacio.

Continuará...